Quejicas.

No te voy a seguir mintiendo. Me pones de los nervios. Tu actitud, tu manera de resolver tus problemas... Son totalmente imbéciles. Estoy cansada de que actúes como una niña pequeña, como si los demás tengan que hacerte favores simplemente porque te los mereces. ¿Te has parado a pensar en lo poco que te los mereces, haciendo lo que haces? Definitivamente, no. Y no creo que lo vayas a hacer nunca. Parece que no te das cuenta de los errores que estas cometiendo en tu vida, y te vas a arrepentir de todo ésto. Deja ya de quejarte por cosas que no tienen importancia en la vida, y preocúpate por lo que en verdad va a hacer una diferencia en tu futuro. Aunque, sinceramente, sé que todo esto no vale la pena. Seguirás siendo una cría de todas maneras...